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domingo, 3 de noviembre de 2019

Lugares de memoria




"Las tumbas no son lugares de descanso sino de memoria".

En este primero de noviembre me quedo con la frase de la joven y excepcional escritora aragonesa Irene Vallejo y la uno a otra  escuchada recientemente de boca de otra también escritora y también joven,  Najat El Hachmi.  Esta última, una catalana de origen marroquí que sabe mucho de lo que habla y escribe, tanto en primera persona como desde la perspectiva que le da haber crecido a caballo entre dos culturas cercanas pero muy distantes. Hace escasamente una semana oí decir a Najat que los españoles tenemos una foto fija de la emigración. Nos quedamos con la imagen del inmigrante llegando al país, especialmente con la de los que llegan a las costas (no olvidemos que son muchos más los que lo hacen en avión). Mientras tanto, ellos se instalan como pueden, cada uno con su suerte, viven, trabajan,tienen hijos que nacen aquí, sientan raíces... y muchos también descansan para siempre entre nosotros. Incluso en los cementerios más recónditos, como pueda ser el de Troncedo, podemos encontrarlos y recordarlos. Quedan en nuestra memoria porque, aunque nacieron en lugares muy lejanos, formaron parte de nuestra comunidad, compartieron anhelos y buenos y malos momentos y, al final, decidieron quedarse para siempre en el lugar de donde ya son sus hijos y sus nietos.


Descanse en paz y siempre entre los nuestros, Dumitriu Bizgan "Titín"




P.C.

jueves, 22 de noviembre de 2018

Los gurriones del Memorial de Torrero






El viernes ocho de junio de 2018 tuve la oportunidad de realizar una interesante y estremecedora visita por algunos lugares de nuestra memoria recuperada. Con la magnífica guía de Pilar Amador, profesora de Historia jubilada, y organizado por la Universidad Popular de Zaragoza el recorrido se desarrolló entre la cárcel de Torrero  y el cementerio del mismo nombre. El relato de  las múltiples vilezas que se sucedieron en estos escenarios desde aquel lejano viernes del 17 de julio de 1936  es tan necesario  como “voluntariamente” ignorado por las familias de las víctimas y perversamente ocultado por los verdugos, afirmaciones que dan para un tratado extenso pero en este artículo lo que quiero destacar es un detalle minúsculo de todo lo aprendido en la jornada. Se trata del grupo de pequeños pajaritos (gorriones) que se asoman al lugar donde concluyó la visita,  las aberturas en el cubo central del Memorial a las víctimas de la violencia franquista que el Ayuntamiento de Zaragoza erigió en su día en el antiguo aparcamiento del cementerio de Torrero, frente a las instalaciones del tanatorio.

El monumento se levanta muy cerca de la tapia donde fueron ejecutadas la mayoría de las 3.543 víctimas de la represión política entre 1936 y 1946, un listado que incluye personas de edades que van desde 13 a 78 años, la mayoría de la capital aragonesa, aunque las hay de otros 348 municipios. Es importante reseñar que su elevación contó con el  acuerdo unánime de todos los grupos políticos en sesión municipal de fecha 25 de septiembre de 2009 y que el Catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Zaragoza, Julián Casanova, y sus colaboradoras Angela Cenarro, Julita Cifuentes, Mª Pilar Maluenda y Mª Pilar Salomón  se encargaron de realizar un exhaustivo estudio para establecer la identidad y circunstancias de los represaliados. La obra se compone de 3.543 placas de acero galvanizado, una por cada una de las víctimas recuperadas con indicación de su nombre  (aunque 607 no han sido identificadas) que se ordenan alfabéticamente según el día, mes y año de fusilamiento, formando una espiral de 500 metros. La información procede de los libros de defunciones del registro civil, del propio registro del cementerio, de los expedientes de inscripción del Juzgado y de los archivos militares. Las anotaciones del fraile Gumersindo de Estella, capellán de la prisión y testigo de las ejecuciones, fueron de extraordinaria ayuda para el recuento elaborado. Pilar Amador, nuestra guía para la ocasión, destacó el importante testimonio de este sacerdote, encargado de confesar a los reos de muerte y que, horrorizado por los horrores  que tuvo que presenciar (valga más que nunca la redundancia), optó por llevar un diario con los detalles de las macabras madrugadas hasta que no pudo resistir más y pidió traslado. En opinión de esta historiadora, su papel es comparable al de Goya en  los Desastres de la Guerra, ambos fueron testigos presenciales nos recuerdan que “eso fue así, yo lo vi, no me lo han contado”. (Los diarios de Gumersindo de Estella así como el estudio de la Universidad están publicados por Mira Editores y se pueden conseguir fácilmente en el mercado).
El diseño del motivo ornamental del Memorial fue obra del equipo de arquitectos de Fernando Bayo y del escultor Miguel Angel Arrudi, que construyeron en el centro una estructura cúbica de chapa, de 4 metros y medio de alto . Este cubo supone el punto de partida de la espiral formada por las chapas metálicas que recuerdan a las víctimas y en él se puede leer la inscripción: "Recuérdalo tú y recuérdalo a otros", versos de un poema de Luis Cernuda. Según el escultor, el cubo "está pintado de color rojo porque simboliza la sangre, el sufrimiento y la pasión de todos los que representa este singular memorial".


La escultura, a su vez, aloja en diversos huecos y planos ( las ventanas a la libertad) una serie de gorriones de bronce a tamaño natural. Es precisamente este motivo el que me ha llevado a invitar a todos los lectores de El Gurrión a este doloroso paseo por nuestra memoria histórica. Los gorriones que se posan en los huecos del monumento fueron elegidos  como símbolo de la pequeñez y fragilidad de aquellas pobres víctimas que se vieron aplastadas por las botas militares y el fuego  de los fusiles. A su vez y, según el propio Arrudi, el conjunto crea una “sensación plástica y paisajista de gran impacto, la espiral transmite la violencia y la brutalidad de los hechos que se conmemoran”.
Entre los pasillos de la espiral que forman las interminables chapas crecen arbustos aromáticos: aliaga, enebro, romero, tomillo, lavanda, salvia, orégano, menta,... que en el momento de nuestra visita necesitaban urgentemente una poda y limpieza pues a causa de las abundantes aguas de la reciente primavera se habían extendido salvajemente. El monumento se consideró único  pues  “en él  las víctimas republicanas aparecen identificadas de forma individual por primera vez" según manifestó el Consejero de Urbanismo e Infraestructuras de la corporación municipal el día de su inauguración, el 27 de octubre de 2010. Añadió también que "no hay ningún ánimo revanchista en el Memorial y se realizó tras el acuerdo unánime de todos los grupos pues se trataba de reconocer la deuda moral que tenía la ciudad con las víctimas". Ese día fue una fecha de inmensa emoción para todos los asistentes, entre los que se contaba el entonces alcalde de Zaragoza, Juan Antonio Belloch, el presidente de Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, el de la Diputación Provincial, Javier Lambán, los alcaldes de algunas de las localidades de procedencia de las víctimas así como innumerables vecinos y familiares de los fallecidos. También asistió al acto Joan Manuel Serrat cuya madre,  como todos sabréis, procedía de Belchite.  La familia fue masacrada y ella, que era una niña,  la única superviviente que consiguió huir a pie, siguiendo las vías del tren y pudo llegar  a Barcelona donde se instaló.
Joan Manuel Serrat en la inauguración del Memorial

Termino esta breve mirada al pasado con unos tristes versos extraídos del "Díptico español", de LuisCernuda
 

La vida siempre obtiene
revancha contra quienes la negaron:
la historia de mi tierra fue actuada
por enemigos enconados de la vida.
El daño no es de ayer, ni tampoco de ahora,
sino de siempre. Por eso es hoy
la existencia española, llegada al paroxismo,
estúpida y cruel como su fiesta de los toros.

Un pueblo sin razón, adoctrinado desde antiguo
en creer que la razón de soberbia adolece
y ante el cual se grita impune:
muera la inteligencia, predestinado estaba
a acabar adorando las cadenas
y que ese culto obsceno le trajese
adonde hoy le vemos: en cadenas,
sin alegría, libertad ni pensamiento.

Si yo soy español, lo soy
a la manera de aquellos que no pueden
ser otra cosa: y entre todas las cargas
que, al nacer yo, el destino pusiera
sobre mí, ha sido ésa la más dura.
No he cambiado de tierra,
porque no es posible a quien su lengua une,
hasta la muerte, al menester de poesía.



Fuentes:

- FRANCO, Marta: "Cientos de personas homenajean a las víctimas del franquismo", El Periódico de Aragón, 28 de octubre de 2010


(Artículo  de Pilar Ciutad publicado en la revista El Gurrión, nº 153 (noviembre 2018)

La revista El Gurrión puede descargarse digitalmente en este enlace

lunes, 30 de octubre de 2017

Un fin de semana muy vivo

           
                      










 A pesar de estar en vísperas de días de muertos (o precisamente por ello) el último fin de semana ha estado repleto de vida en Troncedo. El sábado por la mañana un pequeño grupo de troncedanos  respondió al llamamiento de trabajos de limpieza y recuperación del camino del molino, en el que las lluvias y la nevada tardía de la pasada primavera habían causado un tremendo destrozo con la caída de árboles y derrumbe de grandes piedras en una pared. El resultado de una mañana de colaboración no puede ser más satisfactorio, a nivel de los mejores profesionales.





... y así es como ha quedado el camino. 



Por la tarde/noche, las calles del pueblo estuvieron muy animadas por la chiquillería que se ha apuntado, como no podía ser menos, a las nuevas tradiciones de Halloween que nos llegan del otro lado del Atlántico. Es cierto que quizás, como las fechas no se prestaban a puente, han fallado algunos de los fijos pero aún así, los que estábamos procuramos ambientar el pueblo para goce (y terror) de los más pequeños.

  


El domingo por la mañana, nos reunimos en la Asamblea anual de la Asociación Cultural Castillo de Troncedo en la que revisamos lo realizado en el año y los proyectos pendientes de continuidad así como la puesta en marcha de nuevas iniciativas. Por supuesto, los más mayores aprovecharon para renovar un año más el compromiso con las tradiciones autóctonas de Todos los Santos y nuestro pequeño cementerio lucía limpio y cuidado con flores frescas y velas dispuestas para su encendido en la noche de ánimas. Todo ello acompañado por una meteorología impropia de la fecha pero que nos ha permitido disfrutar una vez más de estos días y deleitarnos con los hermosos paisajes que nos rodean.

  

domingo, 2 de noviembre de 2014

Como en la fiesta ...

"Hay tanta gente como para la fiesta ..." Eso es lo que me contaron que decía un vecino el pasado sábado en Troncedo. Y así era, estábamos otra vez de fiesta, prácticamente todas las puertas de las casas abiertas. Pero en esta ocasión era la fiesta del recuerdo, la obligación anual de acudir a visitar a los seres queridos que nos han dejado y de remozar las lápidas. En mi opinión, no lo hacemos tanto por ellos sino por nosotros mismos, porque este acercamiento, este esmero en no faltar a la cita, nos consuela de su pérdida y nos ayuda a sentir y reconocer su presencia en nuestras vidas. Una presencia alimentada por las innumerables llamitas de velas encendidas junto a todas y cada una de las tumbas de nuestro bonito cementerio.


    EL VIAJE DEFINITIVO

  …Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros
cantando;
y se quedará mi huerto, con su verde árbol,
y con su pozo blanco.

Todas la tardes, el cielo será azul y plácido;
y tocarán, como esta tarde están tocando, 
las campanas del campanario.

Se morirán aquellos que me amaron;
y el pueblo se hará nuevo cada año;
y en el rincón aquel de mi huerto florido y encalado.
mi espíritu errará, nostálgico…

Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol
verde, sin pozo blanco,
sin cielo azul y plácido…
Y se quedarán los pájaros cantando.

                                                                                          Juan Ramón Jiménez


domingo, 3 de noviembre de 2013

Encuentros en noviembre



Primero de noviembre, fecha señalada en el calendario para volver a encontrarnos en Troncedo:




Encuentro nº 1. Visita obligada al cementerio para cumplir con los ritos ancestrales del culto y el recuerdo a los muertos, cada uno desde su sentimiento personal, bien sea con el consuelo de sus creencias religiosas, bien sea por el convencimiento de que mientras permanezca su recuerdo entre los vivos, nadie acaba de morirse del todo. Como todos los años,  nuestro pequeño camposanto reluce, no sólo por el sol sino también por el esplendor de las flores recién depositadas y por las pequeñas lamparillas que, como la tradición manda, se encienden el mismo día 1, víspera del día de ánimas, para que luzcan durante toda la  noche, avivando con su llama la presencia de los espíritus antepasados en nuestras vidas. No siempreel tiempo seco y cálido ayuda a que se mantengan encendidas  pero este año, afortunadamente, ha sido así.




Encuentro nº 2. Añadido al anterior y arrastrado por las influencias del  otro lado del océano, tampoco en  Troncedo nos hemos quedado al margen de la ola del Halloween. Lo cierto es que, asumiendo todo el sustrato frívolo y consumista que acompaña unas fechas tan entrañables y tradicionales por estos lares, los más pequeños se divierten y los  mayores también con ellos.



Encuentro nº 3. No puede haber un fin de semana de afluencia importante al pueblo en el que no haya una cuadrilla de voluntarios que acometan tareas de limpieza y recuperación del entorno.  Esto también se está convirtiendo en una magnífica tradición de nuestra pequeña comunidad de vecinos y amigos. En esta ocasión la emprendieron con una pared caída junto a los contenedores y con la continuación de la limpieza del antiguo camino de cabañera, de tal manera que, en el próximo empentón, seguramente quedará ya abierto totalmente el tramo que va desde el antiguo y hermoso corral del pueblo hasta las modernas naves de casa Soltero. Será una nueva zona de paseo y disfrute para todo el que lo quiera aprovechar.





Encuentro nº 4. Como reciente tradición, también tuvo lugar la asamblea general de la Asociación Cultural  para la presentación de cuentas, balance de lo realizado, sugerencias, proyectos futuros …y sobre todo, reconocimiento al trabajo de los más entregados a la causa que son quienes tiran del carro de todos nosotros. Esto último es fácilmente comprobable dada la abundante presencia de socios en la reunión.
La jornada del sábado concluyó con una castañada comunitaria (no todo va a ser trabajar).
 

                                   ¡Entalto, troncedanos!
                                                     ¡Nos vemos en Troncedo!


P.D: "Algunos" ya han descubierto el placer de pasear por la cabañera