miércoles, 13 de agosto de 2025

Cuadernos de dibujo (Encuentro con Mila Dolz)

 
En el marco de los que han sido nuestros II Encuentros de Cultura y Amistad en Agosto, en la tarde del jueves 7  tuvimos el lujo de contar con la presencia de Mila Dolz, zaragozana, amiga y actualmente profesora de dibujo en la Escuela de Artes de Palencia. Mila se desplazó generosamente hasta Troncedo para ofrecernos una interesante charla sobre Cuadernos de Dibujo, que es como a ella le gusta denominar a la  actividad de ir realizando bocetos  de los lugares (y personas) por donde pasamos. Ella prefiere esta denominación porque es un concepto más amplio, íntimo y personal, que no se limita  a las estrictas reglas del movimiento Urban Sketching.

Después de una somera explicación sobre en qué consiste este movimiento, la dimensión que tiene y ofrecernos algunos ejemplos de la diversidad de estilos de algunos de los sketchers más célebres, nos dio unas pautas para animarnos a no tener miedo.

"No hay deber en el arte porque el arte es libre"  V. Kandinsky


 En una segunda fase, los asistentes nos distribuimos por rincones del pueblo para ir llenando de color y de nuestras interpretaciones los cuadernos en acordeón que ella misma nos había facilitado.

 Una experiencia que resultó interesante para todos los participantes, desde los más pequeños a los más talluditos. Fue un verdadero goce tanto para los dibujantes como para las personas que se los iban encontrando por las calles.

Si queréis conocer más sobre el trabajo de Mila, os recomendamos seguirla en su perfil de Instagram 

Una pequeña muestra de nuestros dibujos

Los y las asistentes tomamos buena nota de los consejos de Mila, especialmente aquel de: 

Cuando te aburras, dibuja.





ÚLTIMA HORA: Nos llegan noticias de que algunos/as de las participantes, incluso las más jóvenes, ya están poniendo en práctica estos consejos...















domingo, 3 de agosto de 2025

La literatura, fuente de conocimiento para todos (Encuentro con José María Sorando)

 Hoy hemos tenido el placer de contar con la presencia de José María Sorando para hablar sobre su libro El lector sin escuela (de Sobrarbe a Detroit) y lo de placer no es una fórmula de cortesía si no una auténtica realidad.

 Por si alguien tenía alguna duda, para participar en estos encuentros lectores no es indispensable haberse leído el libro con anterioridad. Si se ha hecho, se tienen más elementos para el diálogo pero si no es así, puede ser ocasión para animarse a hacerlo y, cuando menos, para acceder a los principales mensajes de la narración. En este caso, es importante destacar aquello que nos ha transmitido su autor sobre los objetivos que le movieron a escribir, no se trataba de contar la historia de su abuelo, no es una biografía al uso, sino la historia de muchos otros abuelos y los diversos contextos sociales, políticos y personales que atravesaron. 

 Por si fuera poco, podemos añadir que las peripecias de la vida de este joven sobrarbense que se rebeló contra el destino que los usos sociales de principios del s. XX le deparaban se parecen mucho a las de muchos otros jóvenes de hoy en día que atraviesan fronteras y mares, arriesgando la vida porque también ansían un destino diferente al que les espera en el contexto socioeconómico de sus lugares de origen.

"Domingo, una mañana  de noviembre en el muelle de Nueva York. Un hombre solo, recién llegado a un país extraño donde la mayoría habla un idioma diferente, donde no le conocen ni le esperan. A nadie le interesa su pasado, su familia, su pensamiento ni su presencia. Si ese mismo día muriera, sólo sería un desconocido llevado a una fosa común, al que nadie acompañaría ni reclamaría. El, allí, y en ese momento, es nadie. Como tantos inmigrantes en cualquier época y lugar. Nada anterior cuenta, su vida comienza de nuevo"  ¿No resulta tremendamente actual?


Pero las 238 páginas del libro albergan muchos más aspectos:

- el análisis de las formas de vida tradicionales y costumbres en Sobrarbe. Todas las cosas que nos cuenta podrían trasponerse palabra por palabra a Troncedo;

- la importancia de la presencia de un MAESTRO (aunque fuera temporal) en un momento dado como motor de cambio en la vida de Domingo. Y también de las MAESTRAS que llegaron en décadas posteriores a estos pequeños pueblos, afrontando con coraje el choque cultural entre la vida rural y la de su posición social y sus ciudades de origen;

Uno de los libros de Blasco Ibáñez
(autor favorito de Domingo)
que conservó toda su vida,
 a pesar de ser un autor prohibido
- el poder de la literatura para cultivar el espíritu del emigrante pobre y explotado que pasaba su tiempo de ocio en las bibliotecas, auténticos templos de cultura. En este punto quiero recordar las palabras de María Moliner cuando decía que "la biblioteca es la continuidad de la escuela", la única escuela en el caso de Domingo y su determinación lectora.

- la descripción de las condiciones de vida laboral de los obreros de la época en las grandes factorías y centros de trabajo estadounidenses;

- el desprecio al diferente, la pretensión de asimilarlo  (Desfile del Crisol de Ford) que no consiguió que Domingo se quitara la boina;

- la violencia desatada en los tiempos de la Ley Seca en EEUU, los gánsteres, el KuKuxKlan...

- los conflictos sociales y bélicos que, por puro azar temporal, fue sorteando Domingo;

- las condiciones precarias y la represión de la posguerra española, el estraperlo...

- el contraste de principios educativos entre la escuela de la República y la escuela franquista..

- la mirada del niño urbanita sobre el entorno (el rural y su propio vecindario) y las vivencias de los mayores...

En fin, un libro en el que, además de viajar por la historia de Domingo, los que ya tenemos cierta edad podemos reflexionar sobre nuestra propia historia y, en el caso de los más jóvenes, conocer de dónde venimos para no dejarse embaucar por mensajes voluntariamente falsarios y simplistas. 

Gracias a todos los que os habéis acercado a aportar opiniones y experiencias, Y gracias de nuevo a José María Sorando y su esposa por haber venido hasta aquí.




 

jueves, 31 de julio de 2025

¿Urban/rural sketching? Mejor, taller de dibujo en Troncedo

 En el marco de los II Encuentros de Cultura y Amistad en Troncedo, en los días previos a las fiestas de Agosto, os emplazamos a una nueva y creativa actividad.


 Recordad: jueves 7 de agosto a las 17:00 h. y para todas la edades




miércoles, 23 de julio de 2025

La península de las casas vacías. Un libro que nos interpela literaria y literalmente.

 

Los soldados estuvieron de pie junto a los juncos alrededor de tres horas y media hasta que, a medianoche, el matemático Tagüeña, encargado de aquellas unidades, dio una señal que era una palmada al hombro que los unos a los otros de forma consecutiva se iban a dar a lo largo de todo el trecho de río que habían escogido para franquear. No lanzaron consignas o gritos de guerra. La operación se llevó a cabo en el más absoluto silencio, interrumpido únicamente de los remos de las barcas mal bogadas. Fueron guiados por aparceros republicanos de la zona, quienes conocían los puntos del río menos peligrosos. Aunque también hubo quien sintió pánico al ver las aguas del río y desertó, como el Campesino, uno de los militares republicanos más célebres y loados.”


El tío Miguel,  campesino y soldado.
(El marco de la foto lo hacían
los propios soldados en sus ratos
 de ocio en el frente)
 
¿Habrá algún íbero descendiente de los hunos o de los hotros o incluso de los "haquellos"  que quedaron en medio que no se haya encontrado con sus ancestros en algún momento a lo largo de estas 695 páginas? En este párrafo de la página 570 yo he visto con nitidez el rostro aterrorizado de mi tío Miguel Lacambra Garcés, otro campesino (este, ni célebre ni loado) frente a esa mayúscula corriente de agua, incomparable a todos los barrancos de Troncedo juntos ni siquiera en las primaveras excepcionalmente lluviosas como la de este año. Fue en ese punto donde también se dio la vuelta y echó a andar hacia Barcelona. Difícil imaginar cómo llegó hasta casa de su hermana Rosalía, sorteando la muerte segura si hubiera sido interceptado por cualquier patrulla militar. Ella lo escondió hasta el final de la guerra en la pequeña portería que regentaba y, a pesar de las penurias del momento, consiguió el sustento para el prófugo, su pequeña hija de 6 años y ella misma saliendo por las noches a robar en las huertas de las afueras de la ciudad, mientras su propio marido estaba preso en un campo de concentración en León. Historias familiares una y mil veces repetidas por ella y mi madre, la hermana pequeña, añorando al que era ”el ser más bueno del mundo”, que más tarde volvería enfermo,  “cogió frío en los riñones durmiendo la siesta bajo una higuera en el frente(una infección sin duda), para morir poco más de un año después entre gritos de dolor, con la sangre envenenada, cuando esos mismos riñones dejaron finalmente de filtrar.


Además de las íntimas sensaciones que evocan las líneas de esta inmensa (por contenido, volumen, datos, recorrido…) novela, la emoción y el desgarro están presenten en todos sus centenares de páginas. Confieso que esa inmersión en la triste y reciente historia de nuestro país se me ha hecho bola en algunos momentos por la exuberancia de las imágenes del realismo mágico que envuelve a toda la obra. No me pillaba de nuevo, ya había oído hablar mucho de ella y de la originalidad de su estilo pero ha habido ocasiones en las que me resultaba difícil desentrañar entre lo mágico y el realismo real (valga la redundancia). Dicho esto, reconozco que el libro es un compendio ambicioso y conmovedor de la mal llamada guerra civil española, que abruma por la dimensión, la exhaustiva  narración y su recorrido geográfico. Y digo mal llamada porque ni fue civil (militares contra el pueblo) ni fue una guerra entre hermanos, conceptos acuñados posteriormente por los rebelados para justificar la inhumana tropelía a quien ellos mismos habían bautizado  como una cruzada bendecida por la Iglesia Católica. Pablo Ardolendo cargando por toda la península con el cadáver de su hermano (a quien él mismo había ejecutado)  para llevarlo a enterrar junto a la familia es la expresión más rotunda de lo falsario de ese concepto de guerra fratricida, los hermanos no abandonan los cuerpos amontonados de otros hermanos en fosas olvidadas.
  
Y si esta abundancia de imágenes y relatos metafóricos ha añadido dificultad a la lectura y  derivado en una digestión más lenta, también hay que reconocerle que contribuyen de manera diferente a todo lo escrito hasta ahora para concluir que la trágica travesía de Jándula, trasunto literario del pueblo natal del autor,  resume de una u otra manera la de todos los pueblos peninsulares así como el personaje de Odisto y su familia, a los cientos de miles de campesinos arrastrados y arruinados vitalmente por la violencia desatada tras el golpe militar. Volviendo a lo conocido de primera mano, en Troncedo no he oído que pasara literalmente eso de que los cristales se desgastaran por la mirada de las mujeres atisbando la llegada del ausente pero sí me han hablado de  las madres que salían corriendo cuando, en un goteo lento y angustioso, por el camino aparecía la figura de un soldado que volvía. Cada una de ellas esperaba que esa vez fuera su hijo, aunque ya sabemos que algunas se llevaron ese anhelo a la tumba.

   Difícil escoger entre tanto dolor y  brutalidad pero el capítulo 112, El puerto de los olvidados, me ha resultado particularmente estremecedor de principio a fin. Y, contra los reparos esbozados en lo referente al estilo imaginativo del autor, no puedo dejar de destacar el valor en la abundancia de citas históricas que acrecientan el rigor de la historia y retratan perfectamente a los protagonistas históricos de uno y otro lado. Y como mi modesta opinión no es más que eso, modesta, después de escribirla he buscado otras y, entre ellas, apunto esta encontrada en un blog de críticas literarias que, aunque difiere notablemente en el valor que atribuye al estilo del autor,  coincide en muchos aspectos con la mía:

Sea como fuere, La península de las casas vacías merece vuestra atención y no saldréis indemnes de ella. Os emocionaréis con los personajes, con el uso del realismo mágico, con las tragedias, con los abusos y la rabia descontrolada de los fascistas, con la indignación de los republicanos demócratas, os indignaréis con las malas decisiones del ejército republicano y los aciertos de un Franco apoyado por el fascismo europeo. Y, ante todo, sufriréis con el devenir de una familia humilde que se ganará vuestros corazones y que lo irá rompiendo hasta la última página. No hay tregua para los Ardolendo, no hay tregua para Odisto y su familia. No hay salida posible de una guerra civil. Y quizás, tras su lectura, seamos un poco más conscientes del dolor que se padeció en España entre 1936 y 1975. Y quizás, tras su lectura, nos comprometamos un poco más con la memoria democrática, con la verdad, la justicia y la reparación de las víctimas republicanas.


En este sentido es el propio autor quien  nos  interpela directamente y de forma abundante entre sus páginas. Se trata de otro ejercicio estilístico peculiar en el que él mismo se hace presente y juega a interactuar con los personajes e incluso a alterar los tiempos y el devenir de la Historia:

“Si os preguntáis la razón por la que he preferido descongelarlos y matarlos a que despertaran en cuarenta años, os la resumo: me daba pena que, en cuatro décadas, los niños despertaran en una sociedad que, en lugar de tratar la guerra con una firme memoria histórica, firmará un pacto de silencio y dedicará únicamente un par de páginas en los libros de texto al conflicto”.




"La guerra es simple: consiste en introducir un pedazo de hierro en un pedazo de carne"
                                                                   
                                                               Jean-Luc Godard

P.C.




sábado, 19 de julio de 2025

La memoria es el des-olvido. Plomo en el alma.

 

Una no va al archivo para ir al pasado. Una va al archivo para traerlo al presente, para activarlo.

Marta Rivera Garza, Profesora en la Universidad de Houston





1. -¿Por qué escribir sobre estas historias antiguas que nadie recuerda y que quizás
(o no) a nadie interesan?
Precisamente por eso, porque nadie las recuerda y, en consecuencia, mucho menos interesan.


2. -¿Y si además no las leen? Esbozo una sonrisa ante esta cuestión evocando la desilusión del entrañable Ramón Rami cuando constataba que había personas que le confesaban no haber leído “todavía” los pedazos de nuestra historia local que él atesoraba y en cuya transmisión volcaba tanta pasión. Yo trataba de infundirle ánimos y dar el valor que se merecía su trabajo: -Sí que las leen, Ramón, y si no lo hacen, nosotros ahí las dejamos y quién sabe si alguien algún día les dará valor y tomará nota de estos testimonios de un mundo que ya no existe pero que existió y del que somos herederos. Lo hacemos por las personas que levantaron estas casas, que nacieron, se criaron y vivieron en ellas, las que trabajaron como burros por mantenerlas y que supieron también hacer hueco a momentos de alegría mientras entregaban su vida para que nosotros ahora nos sintamos orgullosos de este pequeño pueblo, de sus costumbres y de su tradición solidaria*

3. - ¿Y por qué ahora este empeño en traer al presente precisamente las historias olvidadas de unas criaturas a su vez mayoritaria y doblemente olvidadas? Por las mismas razones y con redoblada intención, mucho más después de indagar en sus orígenes y sus trayectorias. Historias de niños huérfanos que correteaban por nuestras calles empedradas, que guardaban los ganados y que trabajaban duramente en las faenas agrícolas mientras cargaban con el sello de plomo en el cuello que certificaba su abandono inicial. Niños que entre estas piedras encontraron el afecto que les había sido robado en origen pero que no dejaron de cargar durante toda su vida con ese mismo plomo del abandono en el alma.

4. - ¿Y qué se saca de rechirar entre los papeles? Mucho. Por ejemplo:

DOS CONCLUSIONES PRINCIPALES

- Una, que no por sospechada deja de estremecer, es que el abandono de una criatura recién nacida ayer y hoy y en cualquier lugar del mundo siempre está ligada a trágicas situaciones de pobreza, enfermedad, desesperación y muerte;

Y  segunda que me duele especialmente en los casos de estos niños recogidos en Troncedo, es que, si la falta de recursos, las circunstancias, la ignorancia y los prejuicios (el plomo en el alma) no hubieran pesado tanto en su ánimo y se hubieran lanzado a la búsqueda de respuestas, quizás más de uno hubiera aligerado esa carga que arrastraron durante toda su existencia y se hubieran reconciliado con su propia historia y estirpe. Este es un aspecto que, conforme iba leyendo testimonios y situaciones concretas de quienes se embarcaron en esas búsquedas, me causaba más pena y rabia. 


LA HERIDA DEL ABANDONO. Ayer, hoy y siempre

… después de año y medio yo he conseguido canalizar la rabia que tenía por la herida del abandono que para mí es más grande que los abusos sexuales y toda la historia que he tenido después porque el abandono me ha marcado…

Abel Azcona, artista multidisciplinar, entrevistado en La Ventana de la cadena SER (sección Radio Lindo) el 10 de abril de 2025

...

* En este sentido fue para mí una satisfacción poderle mostrar a mi querido Ramón el ejemplar nº 19 de la revista Sobrarbe editada por el Centro de Estudios de Sobrarbe en el que Jesús Cardiel publicaba un artículo sobre la genealogía de casa Baile de Troncedo y en un pequeño apartado hacía referencia a “algo” que había leído en uno de nuestros Caixigares. “Ves, Ramón, hay gente (sabia) que lo lee y lo valora”

lunes, 23 de junio de 2025

Revista Treserols, lectura, libros, amigos...

 


Aunque con un poco de retraso hemos recibido el número 22 de la revista Treserols correspondiente a  noviembre de 2024. En este ejemplar se conmemora el 30 aniversario de la creación del Centro de Estudios del Sobrarbe (CES). Como ya os comentamos en la entrada del 31 de julio de 2024, con este motivo se nos invitó a publicar una memoria de actividades de  nuestra Asociación y hemos podido comprobar que efectivamente han recogido nuestra aportación entre las páginas 15 y 17, encontrándonos muy bien acompañados con los relatos de otros movimientos asociativos de la comarca. En la biblioteca de nuestro salón social podréis encontrarla y sorprenderos con toda la movida cultural del territorio y con algunos datos numéricos que nos sitúan en muy buen puesto en cuanto a la capacidad de sumar  socios.

Pero hay más sorpresas, si avanzáis en la lectura os encontraréis  una reseña del libro La vida en Muro de Roda, obra póstuma del buen amigo Rafael Bardají. Continuamos con una presentación de otro libro conectado con nosotros a través de nuestro Club de Lectura; en el artículo De Sobrarbe a Detroit, su autor, José María Sorando, nos explica los hechos y las circunstancias que le animaron a embarcarse en la escritura de su último libro El lector sin escuela. Aprovechamos la ocasión para anunciaros que será el domingo 3 de agosto cuando José María se desplace hasta Troncedo para  explicarnos más cosas sobre el tema y poder compartir con nosotros todos los asuntos que surjan a lo largo del encuentro. Seguro que la lectura de este artículo os animará a leer la obra si no lo habéis hecho ya.





   

lunes, 12 de mayo de 2025

Propuesta lectora


    
Al otro lado de las montañas había otro mundo...

¿Te imaginas a uno de tus abuelos o tiones de Troncedo, allá por las primeras décadas del s. XX, llegando a Nueva York, arriesgando su vida por ganar un mísero salario en las minas de  carbón de Kentucky o en la cadena de montaje del Ford T en Detroit?  Un inocente  buscavidas con boina y bota por aquellos andurriales, agarrándose a su innato y pícaro espíritu montañés de supervivencia... 

Pero no hace falta imaginarlo porque ese  Charlot sobrarbés existió. Se llamaba Domingo Muzás y su nieto, José María Sorando ha dejado testimonio de esa vida entre distópica (sin duda  él debió sentirla así) y cinematográfica en un libro cuya lectura nos transporta  a la dura realidad de la existencia en nuestros pueblos en aquellos años, el arrojo de quienes como Domingo se atrevieron a salirse del destino trazado y en el  contexto  de progreso, conflictos y tragedias que tuvieron lugar en el mundo en general y en este país en particular.

Una excelente opción para estas próximas fechas en los que los días alargan y una buena lectura bajo una buena sombra resulta harto apetitosa. Con el aliciente de que en agosto contaremos con la visita del autor para compartir con él nuestras impresiones y hacerle todas las preguntas que nos surjan. Anunciaremos próximamente día y hora de la cita. Pero antes se nos vienen otros eventos... estad atentos a nuevos anuncios.


El lector sin escuela, José María Sorando. Muzas,  Ed. La fragua del trovador .  


domingo, 8 de diciembre de 2024

Club de lectura: Años de vida (para leer)

El sábado 7 de diciembre tuvo lugar una sesión de lujo de nuestro club de lectura. Agradecemos sinceramente a Marta Borraz que en una mañana tan intempestiva se acercara hasta nuestro pequeño pueblo para compartir con nosotros un cálido encuentro en torno a su libro Años de vida, una obra sobre la figura de su abuelo, Alfonso Borraz, envuelto en algunos de los episodios más convulsos de nuestra historia reciente. Marta nos describió lo difícil que puede resultar escribir sobre algo tan cercano como la propia familia y hacerlo con respeto riguroso a los hechos históricos y a la personalidad de sus integrantes. Desgranó el proceso de elaboración del libro, desde la decisión del título hasta las tareas de documentación, búsqueda de testimonios, selección de información a incorporar… pasando por el complejo trabajo de colaboración con su editor. Entramos igualmente en aspectos de estilo que sitúan al relato de forma precisa en el lugar y el tiempo evocado como, por ejemplo, la incorporación natural de vocablos altoaragoneses o la presencia de dos voces narradoras, tan distantes en el espacio y en lo ideológico y tan próximas en los afectos, metáfora perfecta de las dos Españas en combate. Hubo momentos en los que llegó a emocionarnos o a provocar la risa con algunas de las anécdotas que le han sucedido en las diversas presentaciones y tareas de promoción de su libro que está actualmente en los primeros puestos de la lista de los más vendidos en Aragón.



Fueron prácticamente dos horas de intercambio de reflexiones y consultas sobre una historia que deambula entre acontecimientos, lugares y paisajes conocidos, protagonizados por personajes que no nos dejan de ser familiares en el marco la sociedad rural de la época. Marta consigue recrear el ambiente con la composición de escenarios, diálogos o elementos costumbristas como la música o lo que ella misma denominó banda sonora de la novela. Todas estos recursos nos llevaron a expresar en voz alta una idea que nos rondaba a todos tras la lectura, que de ella podría salir una muy buena película. Esperamos tener muchos años de vida para llegar a verla en las pantallas (tampoco queremos esperar demasiado). Mientras tanto nos emplazaremos para leer la nueva novela que nos adelantó estar escribiendo, basada también en hechos reales pero en las últimas décadas del siglo pasado y de temática muy diferente que igualmente promete mucho…


Gracias, Marta, y que sigas cosechando éxitos, tal y como sabemos que ocurrió en esa misma tarde en la Feria del Libro Aragonés de Monzón.




viernes, 6 de septiembre de 2024

Años de vida... para recordar y LEER

 

No se me ocurre mejor homenaje a un abuelo que escribir su vida. Además el trabajo viene en un lenguaje literario de sorprendente calidad para ser una ópera prima de alguien ajeno a ese mundillo  Y si cualquiera de las peripecias vitales de nuestros ancestros, hasta las más anodinas, son dignas de ser contadas y rescatadas del olvido, cuando éstas se desarrollan en los tiempos de convulsión y desgarro que le tocaron vivir al doctor Borraz, el retrato amplía el foco a todo el pasado reciente de este país. Por eso el libro pasa a engrosar la lista de lecturas recomendadas para la recuperación de la memoria histórica o, mejor dicho, memoria democrática. Una necesidad que cada vez se está haciendo más evidente, por el interés de unos y otros. Los que abogan por el rescate y los que lo hacen por el olvido. Como le escuché decir recientemente a Blas Coscollar en Saravillo con motivo de otro ejercicio de rescate histórico, en este caso de la figura de Constante Bielsa y su familia de músicos franceses así como la del dance de la Rosca de Saravillo, la memoria es el des-olvido. Y es el desolvido de las generaciones anteriores a la nuestra, sus devenires y los conflictos en los que se vieron envueltos el que debemos conocer y traer al presente para no caer precisamente en el olvido interesado de quienes justifican la complejidad y el horro con argumentos simplistas cuando no negacionistas o, simplemente, falaces.

Pero en esta novela tan personal los lectores altoaragoneses no quedaremos decepcionados, podremos emocionarnos doblemente al reconocer lugares y personas muy próximas y cómo se posicionaron en aquellos años feroces, ya fuera por convicción o porque la riada de acontecimientos los arrastró sin remedio. La autora no ha dudado en describirlos con rigor y crudeza, con nombres y apellidos, empezando por los de su propia familia. Un apunte en cuanto al estilo es el acierto del recurso de dos voces en la narración que por un lado son tan cercanas en lo íntimo y familiar y, por otro, tan distantes en lo emocional y vital, No sé si es premeditado, pero pareciera una lejana analogía con el trasfondo de las dos Españas enfrentadas.

En conclusión, una novela de fácil lectura que atrapa desde la primera página y resulta muy apropiada para estos  días de vuelta a la rutina en los que las tareas y desafíos de nuevas etapas profesionales y vitales se agolpan en nuestra cotidianeidad.

Nos encantaría poder contar con la presencia de la autora, Marta Borraz, en alguna de nuestras próximas sesiones del club de lectura de Troncedo para poder preguntarle muchas cosas sobre esta novela y sobre la información que sin duda ha recopilado para documentarse en su escritura. Mientras tanto, mañana mismo, sábado 7 de septiembre la podéis encontrar en Aínsa.




jueves, 5 de septiembre de 2024

Encuentros con José Luis Simón y Araceli Cereceda (y III)

 






                                             




El pasado 8 de agosto tuvo lugar el tercero de nuestros encuentros amistosos y culturales. A partir de ese día, el frenesí… las fiestas, los encuentros familiares, las resacas de todo ello, los viajes...la rentrée. El resultado es que hasta casi un mes después no se ha encontrado momento de sentarse a realizar una pequeña reseña de lo que constituyó esta última sesión. Difícil tarea porque aunque la emoción resta intacta, el resumen de la interesante y técnica disertación de José Luis hubiera precisado de una observadora más formal y rigurosa que hubiera tomado nota por cualquier medio y no confiara todo a su memoria.


Me he referido a una exposición técnica y que también encierra mucho conocimiento de la complejidad del Universo pero la primera parte de la exposición fue muy concisa y clara. Nos adentramos en los inicios de la Geología como ciencia y el paradigma de la Ilustración en la que el ser humano (hombre en general, para más señas) toma un papel de explotador de la naturaleza así como de corrector de sus “imperfecciones”. La Geología actual nos ofrece un paradigma mucho más humanista que se fundamenta en el estudio, conocimiento y respeto por la Tierra y sus fenómenos, lo cual nos habría evitado y nos debería ahorrar grandes desastres como los que seguimos viviendo. Y no solo en los medios de comunicación, sino que algunos han sucedido muy cerca, tal y como pudimos comprobar en el análisis del irracional emplazamiento del camping de Biescas, que dio como resultado la tragedia del verano de 1996 y que, con tanta claridad nos explicó José Luis.


Una segunda parte de la exposición estuvo centrada en el movimiento CienciaArte que, como su nombre indica, une Ciencia y Arte, Ciencia y Emoción, dos facetas indisolubles del conocimiento humano que el racionalismo exacerbado se ha empeñado en disociar tradicionalmente. Aunque no se trata de nada nuevo bajo el Sol (nunca mejor dicho), pues el propio Pitágoras hablaba de “la música de las esferas”. Y a partir de estas premisas, José Luis nos habló de su trabajo (en equipo con Lope Ezquerro y el grupo O’Carolan por desentrañar la música de la Tierra. Con un riguroso estudio de los estratos y su grosor han podido escribir la partitura “escondida” en el subsuelo de distintos parajes. Tuvimos la ocasión de escuchar las grabaciones al respecto y de visionar un delicioso vídeo que combinaba bellas imágenes con música y danza.




Y, por si todo lo anterior no fuera suficiente, Araceli Cereceda y José Luis Simón, las dos “jóvenes promesas” musicales tal y como se presentó la primera, nos ofrecieron un breve pero delicado recital con una hermosa selección de canciones de Labordeta, MonteSolo, Ricardo Constante… y una maravillosa Las manos de mi madre del argentino Peteco Caravajal.




Una tarde de agosto, una víspera de jornadas festivas… inolvidable. Da gusto tener amigos para ESTO.




Si os ha sabido a poco, podéis escuchar la canción completa en este enlace de youtube, aunque confieso que me gustó mucho más en las voces delicadas de José Luis y Araceli. 




lunes, 5 de agosto de 2024

Encuentro con Enrique Satué (II)

Foto: Jovita Olacia
Si el viernes 2 de agosto tuvimos, entre otras cosas, el placer de revivir la presencia de antiguos y poderosos personajes que  sometieron  a estas tierras  y a sus gentes durante siglos, el encuentro del sábado 3 por la mañana tuvo un carácter bien diferente. Enrique Satué, viajero incansable por todo el territorio pirenaico que conoce palmo a palmo tanto como el alma de sus gentes más sencillas y sabias, compartió con nosotros su viaje vital. Creo que no podemos llamar de otra manera esta deliciosa experiencia literaria.  En teoría, venía a presentarnos su último libro, Pirineo y manta, pero este trabajo es más que un libro, es el compendio de toda una vida de estudio, investigación, reflexión y, literalmente, de pisar terreno. En la explicación sobre el proceso que ha seguido para construir esta obra que no deja un resquicio de vida por tocar*, Enrique va trazando con sencillez y espíritu didáctico (no podía ser de otra manera),  entre anécdotas y reflexiones profundas, el camino de toda una vida, la suya.   Fiel a sus orígenes y siempre con la memoria de sus antepasados presente, homenajea con enorme respeto a quienes construyeron ese mundo pirenaico con esfuerzos sobrehumanos: un mundo del que somos herederos...* Pero que nadie se lleve a engaño, ahondar en lo próximo, no es incompatible con abrir la mirada al horizonte lejano. Hace ya mucho tiempo, en la primera página de uno de sus libros,  (no recuerdo cuál) me encontré con un proverbio oriental que decía más o menos... “Cada teja de mi pueblo explica el mundo”, no he podido olvidarlo, vuelvo a él en numerosas ocasiones, cuando un hecho próximo me invita a extrapolarlo a historias ajenas, sea en sus protagonistas, en el espacio o en el tiempo o en todo a la vez. Volví a recordarlo varias veces a lo largo de la exposición del sábado, escuchando el relato de esos viajes iniciáticos que un niño tímido, retraído podríamos decir, hacía sin levantarse de la silla, delante de su colección de cromos de los países del mundo;  o el de las intrépidas vacaciones en el pueblo con tíos y abuelos, en una de las cuales le tocó acompañarlos mientras cerraban la casa. Sin duda esos "grandes viajes" fueron la mejor oportunidad para el aprendizaje y conocimiento del mundo y del alma humana. A las pruebas (a toda su obra profesional y literaria) me remito. No era preciso irse muy lejos para llegar más lejos y a una de las conclusiones más hermosas que he oído en estos tiempos de exaltación de nacionalismos excluyentes y supremacistas... Amar las raíces para echar ramas. Amar el río de la infancia para morir en el mar **

Difícil condensar todo lo que se contó y se sintió en el rato que estuvimos escuchando (y también hablando) pero que nadie piense que fue un ejercicio nostálgico. Hubo nostalgia, sí, por un mundo que ha desaparecido y por los últimos testigos que  también están desapareciendo pero hubo (y sobre todo  hay en Pirineo y Manta) muchas propuestas  que Enrique lanza, para que la montaña y sus pueblos se proyecten hacia un futuro habitado y habitable, conociendo el pasado para rentabilizar lo que él llama las plusvalías que podemos obtener de él. Os invito a leer despacio y con tranquilidad estos dos volúmenes densos a la vez que amenos, trufados de datos, confidencias, testimonios y otros "cuentos". Entre toda esta amalgama iréis topándoos con esas plusvalías de nuestra tierra que debemos hacer visibles. 


*Mariano Coronas, revista El Gurrión, número 175, mayo 2024

** Palabras de Enrique Satué en Troncedo, 3 de agosto de 2024.



Enrique disfrutó como un niño del magnífico balcón que cada día abrimos sobre el Pirineo y, quienes lo acompañamos, disfrutamos todavía más escuchándolo señalar y reconocer todos y cada uno de los picos y accidentes geográficos que dibujan el skyline pirenaico.  







Encuentro con Alvaro Torrente (I)

 

El viernes 2 de agosto tuvo lugar el primero de los encuentros programados para este mes de agosto, una nueva propuesta cultural previa a las fiestas tradicionales en honor al patrón, San Lorenzo. Disfrutamos de la visita de nuestro vecino de Formigales, Alvaro Torrente Sánchez-Guisande, actual propietario de la casa palacio de Formigales. 


Foto: Jovita Olacia


Su exposición constó de una primera parte de tono muy personal en la que nos explicó  el porqué de su decisión de  comprar  un inmueble en un estado de ruina total para reconstruirlo y todo el largo proceso vivido desde el primer paso dado en el año 2000 hasta hoy en el que el edificio ha recuperado todo el esplendor que pudo llegar a tener en sus mejores tiempos. Aunque, por las imágenes que nos mostró, no es aventurado decir que nunca jamás debió lucir como lo hace en la actualidad.  Pero además de compartir con nosotros una abundancia de fotos que ilustran la evolución de los trabajos, las dificultades y otros detalles de la magnífica labor de restauración, también pudimos conocer de primera mano la historia que encerraban estas viejas paredes y los personajes que las habitaron. Ha sido Jesús Cardiel Lalueza  quien ha realizado un riguroso estudio de  las documentación  histórica encontrada sobre la familia de los Mur propietarios de esta fortaleza. El trabajo fue publicado en su día por el Centro de Estudios de Sobrarbe. A groso modo, y pidiendo disculpas por los errores que se puedan colar*, la primera referencia a los señores de Formigales se encuentra en el s.XIV en la persona de un tal Raimundo de Mur, miles de Formigales (es decir, un militar, un soldado al servicio del rey); varias generaciones después, nos encontramos en el s.XVI con una descendiente, María de Mur y Cotón que en 1565 casa con el Barón de Pallaruelo y es con este enlace como las dos familias se entrelazan y fusionan sus señoríos. Por cierto, esta pareja abandona el palacio y se traslada a otra de sus residencias en la tierra baja, en la localidad de Fet. A partir de entonces se iniciará el deterioro del castillo. En el s. XVIII, fallece el último Mur sin descendencia y, después de un largo litigio por la herencia a la que aspiraban numerosos pretendientes (algunas órdenes eclesiásticas incluidas), los bienes pasan a la familia Hurtado de Mendoza de Soria quienes siguieron disfrutando de las rentas del territorio. 

Al último Barón de Pallaruelo, lo encontramos en una nota de sociedad de la prensa madrileña de 1931 en la que se anuncia el enlace del Sr. Ignacio Barroso, barón de Pallaruelo (esta es su carta de presentación más ostentosa),  con una señorita de la alta sociedad. Este mismo nombre, Ignacio Barroso aparece en noviembre de 1936 en una lista de una saca de la cárcel madrileña de Porlier. Una vez concluida la guerra civil,  los vecinos de Formigales retomaron la rutina de pagar la renta anual a cierta dirección de Madrid que era a la que siempre se habían dirigido pero, cuando la persona que los representaba llegó allí, no encontró a quién entregar el dinero. A partir de entonces, fueron ellos, los mismos vecinos, quienes se ocuparon de pagar los impuestos por las tierras y bienes que habían trabajado durante siglos y es así como la propiedad les revirtió (por cierto que hasta finales del s. XX, los verdaderos señores y señoras del palacio fueron las gallinas y otros animales, además de la chiquillería que saltaba las viejas paredes para jugar). 

*Quien esta pequeña reseña ha redactado estuvo muy atenta a la exposición pero no tomó notas y es posible que algunos datos le hayan bailado en la memoria. Pide disculpas y agradecerá cualquier aclaración que proceda.

miércoles, 31 de julio de 2024

22 intensos años condensados en 1500 palabras y 3 fotos

 El Centro de Estudios de Sobrarbe cumple 30 años. Con ese aniversario van a editar un número especial que verá la luz a finales de año de la revista Treserols en el que quieren retratar la actualidad de la vida asociativa de la comarca. Nos han invitado a participar y con mucho gusto lo hemos hecho. Os trasladamos el informe que les hemos enviado y anticipamos que ha sido una tarea harto compleja condensar 22 años de actividades de la asociación en el espacio limitado que nos concedían y, tanto o más, seleccionar 3 fotografías representativas de nuestras iniciativas entre los cientos, por no decir miles, que podíamos haber presentado. 

           Asociación Cultural “Castillo de Troncedo”

QUIÉNES SOMOS Y QUÉ HACEMOS

Troncedo es una localidad perteneciente al municipio de La Fueva (Sobrarbe, Huesca). Se encuentra a 1.008 metros de altura en su extremo sudoriental, en lo alto de un cerro en el declive de la sierra del Turón. La característica más definitoria de Troncedo es su castillo (s.XI) del cual no se guarda más que la torre del homenaje, de dimensiones superiores a las de otros castillos principales en el Sobrarbe (Aínsa o Boltaña), lo que hace pensar en las proporciones que podía tener en su época de uso. Por la importancia del castillo de Troncedo se sabe de la antigüedad del lugar, pues se han podido hallar documentos desde el reinado de Sancho el Mayor (primera mitad del siglo XI), formando parte de la línea defensiva de fortalezas que este monarca levantó en la frontera con los musulmanes.

Hasta finales del s.XX el caserío estaba formado por 25 fuegos pero los datos demográficos se han modificado notablemente a día de hoy. De ser una población que, como tantas otras, rozó peligrosamente el abandono en la década de los años 70 del s. XX, cuando únicamente quedaron 3 hogares habitados con escasos 12 habitantes y alto grado de envejecimiento, nos encontramos ahora con 41 casas levantadas, todas en buen estado de conservación, 13 de ellas habitadas de forma permanente y con un notable descenso en la media de edad de la población que alcanza los 30 empadronamientos. Además se han consolidado varias iniciativas de emprendimiento en el pueblo, entre ellas una vivienda de turismo rural, una pequeña empresa constructora y una nueva instalación agropecuaria. Son varios los factores que han influido en este giro de lo que se anunciaba como desaparición inevitable del lugar y, sin arrogarnos ningún mérito que no corresponda, no podemos descartar tampoco que la Asociación Cultural, creada en el año 2002 por un grupo entusiasta de hijos y descendientes del lugar que se resistían a contemplar impotentemente la desaparición del pueblo que los había visto nacer, haya contribuido con su pequeño granito de arena a este freno de lo que parecía una muerte anunciada.

La asociación Cultural “Castillo de Troncedo” se fundó, como decimos en el año 2002. En la actualidad cuenta con 249 socios, todos mayores de edad, participan activamente en la Asociación, cada uno en la medida de sus posibilidades. Su fines son:


1)Colaborar para la promoción cultural, recreativa, turística y social de la localidad de Troncedo.

2º Potenciar el espíritu de colaboración entre las gentes de Troncedo y los alrededores.

3º Realizar labores de recuperación de la historia, cultura tradicional y etnografía de la localidad.

4º Fomentar el respeto hacia el medio ambiente

5º Potenciar y fomentar los servicios de los que gozan los vecinos.



BREVE RESUMEN DE LAS ACTUACIONES REALIZADAS.


- Jornadas de Molienda tradicional de aceite

Primera molienda de aceite. 2010

Las actividades realizadas en orden a fomentar el respeto hacia el medio ambiente han ido progresivamente avanzando y diversificándose. En un principio la Asociación se propuso recuperar el viejo camino de la fuente y el molino que presentaba un estado de abandono y maleza que impedía el tránsito, así como los tradicionales abrevaderos próximos al pueblo. Esta tarea se ha venido acometiendo de forma voluntaria en diversas jornadas a lo largo de los años y ese trabajo vecinal fue una baza importante para que el Ayuntamiento de La Fueva, con la ayuda de los fondos LEADER, emprendiera la restauración del abandonado molino, el torno de aceite de la localidad, que culminó en el año 2009. A raíz de esta rehabilitación, la misma Asociación, en colaboración con la de Los Molinos de La Fueva, ha venido organizando diversas Jornadas de Molienda de aceite a la manera tradicional. La última edición de estas jornadas, la que era ya la séptima, se celebró el pasado mes de diciembre de 2023 con gran afluencia de público. Se reproduce todo el proceso, desde la recogida de la oliva en la vecina localidad de Panillo hasta la obtención del preciado aceite.

-Trabajos de recuperación y mantenimiento del patrimonio natural y etnográfico del pueblo


1)El camino de la fuente y del molino fue la primera de las iniciativas de recuperación del entorno pero después, de manera periódica se han venido organizando jornadas de recuperación, limpieza y mantenimiento de múltiples caminos y zonas del pueblo, incluidas las viejas cabañeras que estaban impracticables. Estos trabajos han sido, de forma ininterrumpida una de las señas punteras del trabajo de la asociación y las tareas se han ido incrementando a lo largo de los años, entre las más destacadas:

2)Reparación de la ermita de San Urbez, un recinto de arquitectura popular que presentaba riesgo inminente de derrumbe.

3) Recuperación y puesta en valor de las paredes de piedra que bordean los caminos de cabañera del término. Además de reparaciones puntuales de paredes caídas, se han realizado dos notables intervenciones en los años 2021 y 2022 en colaboración con la Asociación Muretes de Arte, subvencionadas por el Programa de Zonas Despobladas del Gobierno de Aragón.

Recuperación paredes de piedra. Septiembre 2021


4) Recuperación, limpieza y señalización de tres senderos circulares de pequeño recorrido con salida y regreso al pueblo, en los que se han dignificado diversos hitos geográficos y etnográficos de la localidad: limpieza y colocación de un panel informativo en el mirador de Las Bruteras, magnífico balcón sobre el Valle de La Fueva y las cordilleras pirenaicas que lo enmarcan; recuperación de la antigua cruz de término denominada San Isidro y del camino que lleva hasta ella; recuperación y limpieza de la fuente y lavadero de San Ángel, …

- Ruta senderista de primeros de mayo. Desde hace 11 años la Asociación Cultural Castillo de Troncedo tomó la iniciativa de recorrer los viejos caminos de herradura de La Fueva y explorar el territorio a la manera de antes, a pie. Poco después se unió con la Asociación A redolada d'A Fueva, para realizar un tramo cada año, rodeando perimetralmente La Fueva. Se ha podido constatar el poder de convocatoria que año tras año ha tenido este “encuentro festivo” que ya se ha convertido en tradición.

-Jornada Cultural de Junio. Es junto con los trabajos medioambientales otra de las señas de identidad de la Asociación. Una sus acciones prioritarias ha sido siempre fomentar las ocasiones de encuentro y convivencia, dispersándolas a lo largo del año para no concentrarse exclusivamente en los días de las fiestas patronales. La jornada cultural que se celebra todos los años en junio también se ha convertido en una tradición anual con una programación rica en actividades culturales y artísticas de calidad, con ponentes de reconocido prestigio en diversas materias relacionadas con Aragón y el Pirineo. Por nuestro pueblo han pasado escritores, escritoras, cineastas, historiadores, etnólogos, pirineístas… así como grupos de teatro. También esta jornada ha sido marco para homenajes y reconocimientos a personas destacadas (antiguos maestros, pastor, casas que nunca cerraron, antiguo y querido párroco…); exposiciones de fotografías, de obras artísticas varias, de coleccionismo… en numerosas ocasiones realizadas con la participación entusiasta de los vecinos y vecinas. La jornada se completa con una cena de convivencia y actuaciones musicales en directo. Este año 2024 se ha celebrado la XX edición.

Jornada Cultural Junio 2007. Actuación del grupo Monte Solo

- Otras actividades. Mural que recrea la fachada de la antigua escuela del pueblo y numerosas actividades de fomento de convivencia a lo largo del año : excursión a lugares de interés a finales de agosto, actividades varias medioambientales y culturales en Semana Santa, castañada a primeros de noviembre…

. Nuevos proyectos: En el año 2023 se ha puesto en marcha un nuevo proyecto que aúna la convivencia con la promoción cultural: un club de lectura con el que esperamos conseguir que, al menos dos veces al año, un autor/a de interés se acerque hasta nuestra localidad para compartir con nosotros impresiones tras la lectura de su obra. Inauguramos este ambicioso proyecto en diciembre con la presencia de Severino Pallaruelo.

- Difusión y divulgación de las diferentes actividades

1) Boletín anual de la Asociación. La Asociación edita anualmente la revista El Caixigar, fruto del trabajo en equipo. A partir del año 2023 inició una segunda etapa, con nueva dirección y en junio de este año se ha editado el número 21.

2)También hay diversas páginas web, mantenidas por personas de la Asociación que actúan como órganos oficiosos para la difusión de sus actividades y de la vida local:

Página web/blog https://nosvemosentroncedo.blogspot.com/

página de Facebook https://www.facebook.com/Nos-vemos-en-Troncedo-172079886163771, y el perfil de Instagram https://www.instagram.com/elcaixigar/?hl=es

-Reconocimientos/premios

1) Aunque no venga acompañado de diploma o premio en sí mismo, consideramos un importante reconocimiento al trabajo voluntario y vecinal de recuperación la decisión del Ayuntamiento de La Fueva de elegir el molino de Troncedo como objeto de la primera intervención de lo que es un programa a largo plazo de recuperación del patrimonio de molinos antiguos del municipio.

2) Accésit premios Félix de Azara en la edición 2006 en la categoría de entidades sin ánimo de lucro.

3) Premio Félix de Azara en la edición 2016 en la categoría de entidades sin ánimo de lucro.


Troncedo, julio de 2024